Los Gazules
 

"Hay pasajes y lugares que se rememoran unidos a determinadas personas que les imprimieron la dimensión del tiempo..."

"Yo creía que uno debía poder escoger a su familia y aquel abuelo me gustaba. Cuando te besaba, su barba olía a membrillo..."

"En los tibios atardeceres del otoño, escampada la lluvia, llegan a los ventanales de la galería los mil aromas del campo. La uva recién vendimiada se hace mosto en el lagar. Los hombres la pisan con erotismo... Lejano chirrido del carro de bueyes allá por la corredoira. Una moza revienta en un aturuxo ancestral. Las campanas de la parroquia doblan, como de costumbre, a muerto. El mirlo se recoge y canta desde el otero."

"Las plantas de la galería parecen comprender la tragedia y se estremecen discretas...

Los niños quieren a Crescencio porque al hablar huele a lauro y su boca les parecía una cesta de camelias...

Al amanecer, lo encontraron ensartado en el pajar con una horquilla de apañar el heno. Tenía los cabellos revueltos, el blanco cuerpo con moratones cárdenos, la mirada azul confundida en el cielo... le había cortado el sexo. Después, no volvieron a florecer los naranjos, ni los mandarinos ni los limoneros. Las gentes olvidaron los olores del azahar y del almizcle. Se hizo más oscuro el trueno. Todos los lauros se secaron y nadie se preguntó la causa. Tampoco el mirlo ocultó su pena..."